El cuarto episodio de la segunda temporada de La Casa del Dragón inició la Danza de los Dragones, nombre que se le dio a la guerra civil de la Casa Targaryen que culminó con la casi extinción de las criaturas gigantes. Dirigido por Alan Taylor, el episodio no defraudó y presentó una emocionante secuencia de acción combinada con impresionantes imágenes, muy diferente a una de las batallas de Juego de Tronos que, en teoría, debería haber sido la culminación de la serie original.
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[Advertencia: spoilers de La Casa del Dragón a continuación]
En la octava y última temporada de Juego de Tronos, el tercer episodio titulado "La larga noche", mostró finalmente el choque entre la alianza de Westeros liderada por Jon Snow (Kit Harigton) y Daenerys Targaryen (Emilia Clarke) contra los Caminantes Blancos de Rey de la noche (Vladimir Furdik). La batalla entre vivos y muertos involucró a tres dragones: Drogon, Rhaegal y Viserion, los dos primeros estaban del lado de Jon y Dany, mientras que el último, zombificado tras ser asesinado por el Rey Nocturno, estaba en el equipo de los villanos.
Dirigida por Miguel Sapochnik, que había dirigido dos de los episodios más memorables de la serie, "La larga noche" fue un auténtico desastre. Además de las cuestionables elecciones creativas de los showrunners David Benioff y Dan Weiss, la fotografía extremadamente oscura fue duramente criticada por los fans de la serie, que apenas podían ver el "baile" de los dragones al aire libre. El duelo principal de la saga quedó escondido bajo las nubes y acabó siendo, perdón el juego de palabras, una mera sombra de lo que prometía.
En La casa del dragón, la historia fue completamente diferente. Taylor, que también dirigió importantes episodios de Juego de Tronos , sacó a la luz la batalla entre los dragones. Rhaenys (Eve Best) y sus Meleys se enfrentaron a Aegon (Tom Glynn-Carney)/Sunfyre y Aemond (Ewan Mitchell)/Vhagar bajo el Sol de Rooks' Landing en las secuencias más emocionantes de toda la serie hasta la fecha.
Además de poder ver el combate en su conjunto y ver claramente las consecuencias de los ataques a los dragones, Taylor no dejó de lado al ejército liderado por Criston Cole (Fabien Frankel), quien observaba el baile desde el suelo. Los soldados fueron incinerados y pisoteados, mientras Vhagar y los demás se batían en duelo para decidir qué dragón permanecería en pie.
De esta forma, el spin-off corrige un grave error que Juego de Tronos no podría haber cometido. Aunque la serie original tuvo su parte de episodios emblemáticos y grandes batallas diurnas, "The Long Night" debería haber sido la culminación narrativa y de efectos visuales de la historia. Al menos La casa del dragón y sus productores demostraron que aprendieron la lección.