Natalie Portman forma parte de una pequeña lista de actores que han trascendido del mundo infantil al adulto donde comenzó en 1994 con El perfecto asesino, película del francés Luc Besson donde interpreta a Matilda, una niña de 12 años que es entrenada por Leon (Jean Reno) para ser una asesina. Sin embargo, es este mundo adulto al que se enfrenta Matilda el que la convierte en una joven adulta que llega incluso a seducir a Leon en un par de momentos durante la película.
Portman habló sobre este tipo de encallisamientos y lo peligroso que pudo ser para su desarrollo en su juventud y posteriores años (vía).
"He hablado un poco de esto antes, de cómo de niña me sexualizaron mucho, algo que creo que les pasa a muchas chicas jóvenes que aparecen en pantalla. Me asustó mucho. Obviamente, la sexualidad es una parte fundamental de la infancia, pero quería que estuviera dentro de mí, no dirigida hacia mí".
Portman señala que atravesó por una larga faceta de Lolita, en donde recibía varias ofertas para hacer papeles cuando era adolsecente en los que se le sexualizaba, incluso llegó a recibir la propuesta de protagonizar Lolita en 1997, en ese entonces a sus 15 años.
Y posteriormente también pasó por la faceta de "Chica que le ayuda a chico a darse cuenta de sus emociones", esto en referencia al estereotipo en Hollywood de la Manic Pixie Dream Girl, y que se puede ver en Garden State de 2004, pero volvió a evitar encasillarse en esos papeles a pesar de recibir varias propuestas.
Natalie Portman dijo que adoptó una actitud seria durante su juventud en los sets, como forma de barrera inconsciente que le permitió trazar una línea para impedir que se le acercaran de una forma que no fuera profesional.
El perfecto asesino se encuentra disponible para rentar y comprar en plataformas digitales y Garden State en Mercado play.